viernes, 24 de marzo de 2023

ESPECIALES F1- Nº 2

 Fórmula 1 

Ayrton Senna



El 21 de marzo de 1960 nacía uno de los mas grandes pilotos de la historia de la Formula 1 y de los pocos que entran en la categoría de legendarios, el enorme Ayrton Senna, a modo de pequeño homenaje repasamos algo de su vasta trayectoria





EL LEGENDARIO AYRTON SENNA 


Empezó a conducir y competir en un kart a la temprana edad de 4 años. No obstante, su primera participación oficial en una carrera con este tipo de monoplaza no se produjo hasta que cumplió 13 años y en ese mismo año 1973 es cuando se alza con el Campeonato Paulista de Karting, en 1977, subió un peldaño más hacia la élite tras conseguir el Campeonato Sudamericano de dicha especialidad. Su talento no pasó desapercibido para algunas escuadras que competían internacionalmente y, al año siguiente, en 1978, se unió al equipo italiano DAP.
Trabajando con DAP

Esto hizo que se trasladara a Inglaterra y dejase su país natal. Disputó con ellos tres ediciones del Mundial de Karting (1978-1980) en las que quedó subcampeón en 1979 y 1980.

En 1981 participó en la Fórmula Ford 1600, de la que salió campeón británico.
En su debut en la F1600

En la temporada siguiente volvería a la gloria ya que en 1982 se proclamó campeón europeo y británico de la Fórmula Ford 2000,
Campeón en F2000

Y en 1983 hizo lo propio en la Fórmula 3.
Campeón en Fórmula 3


Su nombre ya se escuchaba en la máxima categoría del automovilismo. 
Esos tres trofeos conseguidos de forma consecutiva en los certámenes previos a la Fórmula 1 no dejaron indiferente a los managers y fue en 1984 cuando firmó su primer contrato en el Gran Circo con la modesta escudería Toleman Hart


Una nueva era en la Fórmula 1

Como el título de la novela de George Orwell, 1984 supuso la temporada de debut de Ayrton Senna en la Fórmula 1, y lo hizo en un escenario inmejorable: el Gran Premio de Brasil. 
Debut en Jacarepaguá en marzo 1984

No obstante, no logró puntuar con su TG184, algo que sí conseguiría en la siguiente carrera, el Gran Premio de Sudáfrica, y en la tercera prueba del calendario disputada en Bélgica.

Si hay un momento estelar por el que se le recuerda su año de rookie es el Gran Premio de Mónaco. Sobre unas calles del principado totalmente mojadas, Senna dio una auténtica exhibición bajo la lluvia que caía sobre el asfalto aquel domingo, a pesar de que nunca había corrido aquí antes. Partió desde la posición 13º en la parrilla de salida y acabó subiendo al segundo escalón del podio monegasco en una hasta hoy polémica decisión, justo por detrás de Alain Prost, con el que tendría muchas batallas en los tiempos venideros.


Fichaje por Lotus y primeras victorias

El buen hacer de Senna con Toleman Hart llamó la atención de muchos equipos. Acabó en novena posición el campeonato y con tres podios en su haber, ya que a la epopeya ya comentada hay que añadirle dos terceros puestos cosechados en Gran Bretaña y Portugal. No obstante, su participación acabó de forma prematura e inesperada. Senna negoció su fichaje por la escudería Lotus y firmó su incorporación para el año siguiente a espaldas de Toleman, quienes vetaron su presencia en el GP de Italia.
Ficha con Lotus en 1985


No obstante, este hecho no truncó en absoluto la carrera que tendría posteriormente Senna: en ese primer año con su nuevo equipo, que portaba motores Renault, consiguió la primera victoria de su carrera deportiva en el mundial en territorio luso, precisamente en uno de los escenarios en los que ya había subido al podio el año anterior. Como no podía ser de otra forma, fue bajo la lluvia y, a excepción del segundo clasificado, el italiano Michele Alboreto (Ferrari), dobló a todos los pilotos.


No fue la única ocasión en la que ocupó el escalón más alto aquel curso, sino que lo hizo una vez más en Spa-Francorchamps. También subió al podio en los grandes premios de Austria (2º), Países Bajos e Italia (3º). Acabó en cuarta posición con 38 puntos, la cual repetiría al año siguiente con 55 unidades en su casillero.



En el año siguiente, la relación con su compañero de equipo, el italiano De Angelis, empeoró considerablemente ya que ambos exigían un mejor status quo dentro del equipo. Este conflicto se saldó con la marcha del transalpino a Brabham a final de año. Aquella temporada, la de 1986, Senna consigue su primer triunfo sobre seco en el Gran Premio de España disputado en Jerez tras una bonita pelea con el británico Nigel Mansell que acabó con foto finish, ya que se impuso por tan solo 14 milésimas.
Apenas 14 milésimas


Tras finalizar el campeonato, Lotus firma con Honda para que les suministre motores de cara a 1987, unos compañeros de viaje que hicieron a Williams alcanzar la gloria el curso previo como campeones del mundial de constructores. El poder de los componentes japoneses despertó una gran brecha entre los equipos que los portaban en aquel momento (Williams y Lotus) frente al resto. Senna consiguió su mejor posición en el campeonato (3º) con una pole y seis podios y un total de 57 puntos.


Fichaje por Mclaren y primer título

Descontento y frustrado a partes iguales por el dominio de Williams y la incapacidad de Lotus para proporcionarle un coche ganador, Senna anuncia en el Gran Premio de Monza que en 1988 empezará a correr para la escudería Mclaren. Los británicos habían asegurado que habían adquirido motores V6 turbo de Honda para aquel año con el firme objetivo de luchar por el campeonato.
Senna se va a McLaren en 1988


En Mclaren el piloto nº1 era Alain Prost, bicampeón ya en aquel momento y que no se opuso a la llegada del brasileño al equipo. Lo que quizá no esperaba el bueno de Prost es que su nuevo compañero ganara tantas carreras en ese año 1988 (8) y que se terminase alzando con el título sobre la lluvia que cayó sobre Suzuka durante el GP de Japón, en el que hizo la pole, se le caló el coche en la salida y tuvo que remontar desde la posición 14 hasta conseguir finalmente la victoria y el primer mundial de los tres que obtuvo.




Rivalidad Senna vs Prost

Los años venideros fueron los que marcaron para siempre la leyenda del brasileño en la Fórmula 1. Y es que, tanto en 1989 como en 1990, se jugó el título del campeonato con Prost hasta el final. En ese bienio conoció la cara y la cruz, y es que como él decía “el segundo es el primero de los perdedores”. Quedó subcampeón en el primero de ellos tras chocar con su compañero de equipo y rival en el final de la recta 130R e inicio de la chicane del triángulo de Casio de Suzuka.
Senna vs Prost una rivalidad legendaria


Su reincorporación a la pista mediante la ayuda de los comisarios, cortar la chicane tras la colisión y la pisada de la línea del pit-lane hizo que fuera descalificado a pesar de firmar una remontada antológica tras arreglar su monoplaza en boxes. Era la penúltima carrera y necesitaba ganar para mantener sus opciones, pero esa descalificación le dio el título a Prost.


Al año siguiente, y en el mismo escenario, Senna se cobraría su particular venganza frente al francés, que se había marchado a Ferrari. Ambos partían desde las dos primeras posiciones, pero en la primera curva se fueron a la grava tras quedar enganchada la rueda delantera izquierda del brasileño con la trasera derecha del galo. Dos finales de película que nunca serán olvidados.


Tercer título y fallecimiento

En 1991 logró su tercer y último cetro mundialista, año en el que por fin pudo celebrar una victoria en casa tras imponerse en el GP de Interlagos. Aunque no fue tan polémico, eso no significó que fuera sencillo, ya que la pelea frente a Nigel Mansell (Williams) no se decidió hasta el final.


Los dos años siguientes cosechó un 4º puesto (1992) y un subcampeonato (1993) con ocho victorias más en su palmarés. Todo ello antes de aquel desgraciado accidente el 1 de mayo de 1994 conduciendo su Williams Renault en Ímola tras impactar con las protecciones en la curva Tamburello.
El rey bajo la lluvia


CURIOSIDADES

Senna el heroe, la historia con Érik comas

Érik Comas no fue un mal piloto de Fórmula 1. Hijo de su época, aterrizó en la categoría reina ya con 27 años, lejos de los adolescentes que llegan hoy en día, pero siendo una de las grandes promesas del automovilismo. No obstante, era el vigente campeón de la Fórmula 3000, por entonces la antesala de la Fórmula 1, y también había cosechado sus éxitos en Francia.
Después de una temporada de debut en la que se tuvo que pelear con el brutal V12 de Lamborghini, en 1992 Érik Comas estaba floreciendo. Seguía en Ligier, pero ahora llevaba un V10 de Renault que era mucho más razonable que el monstruo italiano, y los resultados lo estaban plasmando: Comas ya era un habitual de la zona de puntos e incluso fantaseaba con subirse al podio.
Erik Comas 1992

Pero entonces llegó el Gran Premio de Bélgica de 1992. Eran los entrenamientos libres del viernes y Comas estaba en el mejor momento de su carrera deportiva, pilotando con mucha confianza. La terrible curva de Blanchimont, una de las más rápidas del circuito, ya en el final de la vuelta, antes de llegar a la Bus Stop, le estaba esperando.
Comas perdió la trasera de su Ligier en una zona en la que se rozan los 300 km/h y chocó contra el guardarraíl. La mala suerte quiso que una de las ruedas golpease a Comas directamente en la cabeza, quedándolo inconsciente. Como es habitual en accidentes así, el piloto quedó rígido, accionando el acelerador con el pie. Se mascaba la tragedia.


Como si se tratase de un milagro, abriéndose paso entre el polvo que había levantado Comas y coche que trataban de esquivar el accidente apareció una figura. Era Ayrton Senna, corriendo todo lo que podía para atender a Comas. El brasileño, por entonces vigente campeón del mundo de Fórmula 1, fue el primero en llegar.Senna venía rodando un par de segundos por detrás de Comas, lo suficiente para ver el accidente en primera persona. Cuando pasó por su lado, escuchó el motor acelerado entre 7.000 y 8.000 revoluciones y vio al francés inconsciente. Su mente no tardó en darse cuenta de la situación. No dudó en aparcar el McLaren al borde de la pista y correr en socorro de Comas.
Senna se jugó la vida. En el vídeo se puede ver perfectamente la escasa visibilidad que había debido a la nube de polvo que había provocado el accidente de Comas. Su coche estaba en mitad de la pista, prácticamente en la trazada ideal, y otros monoplazas venían por detrás tratando de esquivarlo.

Cuando llegó al Ligier, lo primero que hizo Senna fue apagar el motor, evitando el incendio que estaba a punto de provocarse debido a que Comas mantenía constantemente accionado el acelerador, impidiendo que se refrigerase. Después, puso erguida la cabeza del francés para que la presión no dañase sus vértebras.
Aplicando sus conocimientos sostiene la cabeza de Comas


Senna era amigo íntimo desde hace años del doctor Sid Watkins, el ángel de la guarda de la Fórmula 1. El campeón impidió que los comisarios atendiesen a Comas porque él sabía mejor que nadie qué correspondía hacer en una situación así: había tenido decenas de conversaciones al respecto con Watkins. Simplemente, mantuvo recto el cuello de Comas hasta que llegó el doctor."Cuando llegué, Senna estaba de rodillas, sosteniendo la cabeza de Comas, del modo correcto, debo añadir", dijo Watkins en su día. El doctor británico puso hincapié en lo acertado que estuvo Senna impidiendo que le quitasen el casco a Comas antes de que él pudiese hacer un chequeo básico de los daños.
Senna salvó la vida de Comas. Su rápida intervención evitó tanto el incendio como las posibles lesiones cervicales que hubiese sufrido el francés. "Ayrton Senna salvó mi vida", dice el propio Comas. El piloto de Ligier se recuperó bastante rápido, fichó por Larrousse para la siguiente temporada y la Fórmula 1 siguió su curso.

Y entonces llegó el 1 de mayo de 1994, el día más triste de la historia de la Fórmula 1. Comas rodaba decimoséptimo en aquella fatídica sexta vuelta cuando pasó por Tamburello y vio el coche de Senna destrozado. Pocos segundos después comenzó a ondear la bandera roja, la carrera quedaba detenida.

Comas regresó al garaje y se encontró con lo que más temía. Senna estaba muy herido. Él había pasado por su lado en aquella curva de Tamburello. Su mente burbujeaba, maquinando conjeturas tan fútiles como humanas. Aquel box del equipo Larrousse debió ser una celda para Comas, tanto que se escapó.
Los auxiliares y comisarios que estaban allí inmediatamente detuvieron a Comas y le impidieron bajarse de coche, pero lo que vio fue suficiente para saber qué estaba pasando. Se estaba muriendo Ayrton Senna. Pese a ello, la carrera se reanudó, pero Comas fue el único que ya no quiso tomar partido en ella. El equipo le obligó a terminar la temporada, pero cuando acabó dejó la Fórmula 1.


Comas estuvo años sin poder decir nada al respecto, simplemente asumiéndolo, pero finalmente se liberó. Y su relato es sobrecogedor sobre lo que vio y sintió aquel 1 de mayo parado en la curva de Tamburello, sentado en su Fórmula 1 mientras gran parte del espíritu de la categoría se iba en aquel helicóptero blanquirrojo.

"Me quedé paralizado, porque me encontraba ahí, al lado del hombre que me había salvado la vida dos años antes, y no poder hacer nada por él era algo que me hacía sentir terriblemente mal. Él me salvó la vida, pero yo llegué demasiado tarde", decía Comas, aún con la voz entrecortada décadas después del suceso.

Senna vs. Shumacher




Hay muchas mas historias, pero hay suficientes documentales, películas y una serie por venir de uno de los mas grandes de la historia, Ayrton Senna 

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